Si realmente somos salvos, es porque el Espíritu Santo de Dios ha entrado a nuestras vidas y está haciendo ese PROCESO de LIMPIEZA que permite que nuestras vidas sean realmente DIFERENTES reflejando estas NUEVE VIRTUDES tan especiales, veamos:
22Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. 24Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. 25Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu. 26No nos hagamos vanagloriosos, irritándonos unos a otros, envidiándonos unos a otros. - Gálatas 5:22-26
Dios espera de nosotros vidas donde se refleje el FRUTO del Espíritu: AMOR al prójimo y a Dios, GOZO permanente, PAZ aún en medio de las dificultades, PACIENCIA en cada circunstancia que haya que vivir, BONDAD hacia todas las personas, FE plena en las promesas de Dios y en cada uno de sus mandamientos, MANSEDUMBRE en todas nuestras actitudes y una TEMPLANZA firme en nuestras creencias.
Si ese fruto se manifiesta en nosotros, y gobierna nuestras vidas, no tenemos nada a que temerle ya que estaremos siguiendo las pisadas del Rey del Universo.
Como estudiamos Efesios 4:17-32, tal vez uno de los más importantes en la vida de un AUTENTICO CREYENTE, si tuviéramos en cuenta cada uno de los consejos que acá se dan, seríamos realmente SANTIFICADOS. La voluntad de Dios es que no andemos como el resto del mundo que solo vive en la vanidad de su mente, alejados de Dios, ignorándolo por completo, hombres que han perdido la sensibilidad y están entregados de lleno a los placeres del mundo. Nuestro comportamiento NO debe ser así, sino de acuerdo a lo que hemos aprendido de Cristo, nuestro Amado Modelo a seguir. Dios nos pide que debemos despojarnos del viejo hombre como quien se quita los trapos sucios y viejos y nos invita a RENOVARNOS por completo en el espíritu de nuestra mente, es decir a ponernos un TRAJE NUEVO, a cambiar por completo nuestros pensamientos y actitudes de acuerdo a lo que Dios nos muestra en su justicia y santidad de la verdad. TODO, absolutamente TODO lo viejo debe quedar atrás, en el olvido, TODO en nosotros debe ser nuevo: Miradas, pensamientos, palabras, actitudes, etc…
Si somos LLENOS del Espíritu Santo, atrás debe quedar la mentira, los disgustos, los robos, la pereza, el egoísmo, las malas palabras, es decir, TODO lo que contrista al Espíritu Santo.
Es necesario sepultar por completo la amargura, el enojo, la ira, la gritería, las malas palabras y TODA malicia. En la nueva vida en Cristo debemos ser Benignos, misericordiosos, sabiendo perdonar, siguiendo el ejemplo de Cristo y el consejo de Dios.
Varias RECOMENDACIONES bien especiales:
Dejar que el Espíritu Santo obre en nosotros.
Hacernos el FIRME PROPOSITO de ANDAR en EL ESPIRITU haciendo EVIDENTES esas 9 cualidades de SU FRUTO.
Estas NUEVE VIRTUDES deben VERSE cada día en NUESTRA VIDA.
Ver si son una realidad en nuestras vidas estas nueve cualidades del Fruto del Espíritu Santo y tomar correctivos ya mismo.
Con Cristo, debemos crucificar la carne y sus pasiones.
Abandonar la vanagloria, la ira y la envidia y TODO lo que no agrade a Dios.
Llevar vida SANTIFICADAS como reflejo de la Obra del Espíritu Santo en nosotros.
El FRUTO del Espíritu
1. Las virtudes del fruto son PERFECTAS, hay que cultivarlas, son de Dios (Vs 22-23)
2. Estas virtudes bien cultivadas desarraigan la carne y el pecado de nosotros (Vs 24)
3. Si vivimos en el Espíritu, estas cualidades deben florecer y resplandecer en nosotros (Vs 25)
4. La vanagloria, la ira y la envidia deben desaparecer como resultado de la obra del Espíritu en nosotros (Vs26)
Dios nos quiere recordar nuevamente El FRUTO del Espíritu. Quien nos habla es un Dios MISERICORDIOSO que ha IMPLANTADO Su Santo Espíritu en nuestros corazones a fin de que mediante su llenura se reflejen en nuestras vidas esas 9 virtudes que son esenciales en la vida de un creyente.
Es impactante ver la claridad con que Dios me muestra lo que debe reflejarse en nuestra vida cuando la llenura del Espíritu es REAL en nosotros.
Esta enseñanza es para aplicarla día a día, examinándonos a diario para ver si cada una de estas VIRTUDES se están dando en nuestra vida y tomando los correctivos del caso.
Amor: A todos los que están en nuestro entorno
Gozo: En medio de tantas dificultades
Paz: Pase lo que pase
Paciencia: Con aquellos que no quieren entender
Benignidad: Con el necesitado física y espiritualmente
Bondad: Con todo el mundo, especialmente el perdido
Fe: Confianza plena en las promesas de Dios
Mansedumbre: Aunque nos maltraten de una y otra forma
Templanza: Mano fuerte contra el pecado.
Dejemos a un lado TODO lo que NO AGRADA a Dios
Fabio
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